¿Cómo meter en una única palabra, lo efímero, lo sublime, lo intangible, con algo tan rotundo y material como una tienda en la red y off line?
O lo que es lo mismo, encontrar un nombre para nombrar a la belleza, a la estética, a la armonía de formas y colores. A la belleza natural y a la artificial. A la creación.
Y, a la vez, para denominar al nuevo proyecto de Probeauty, una tienda online de productos profesionales de belleza y estética. Bonito, arriesgado y difícil.
Así me llegó el reto a través de Miguel Barqués, excelente diseñador gráfico autor de la identidad corporativa del proyecto
Tengo un proyecto entre manos que está encallado en el naming. El sector es el de Belleza (Peluquería, Barbería, Cosmética, Estética femenina).
Productos de la gama premium – alta calidad – tanto de hombres como de mujeres. Y se centra en la venta on line exclusivamente a profesionales.
También se estudia abrir tienda física con el mismo nombre y en futuro posiblemente franquiciar.
Busqué caminos, pistas que me llevaran a algún elemento que aglutinara en si mismo la esencia de la estética, de la belleza.
Y me encontré con el número PHI -Φ – y la divina proporción
¿Alguna vez te has preguntado que nos lleva a todas las personas a considerar bellas las mismas cosas?, ¿qué tiene en común todo aquello que consideramos hermoso?. Independientemente de los gustos culturales de cada cultura y época la belleza esconde un secreto que rebasa estos límites y que está presente en todo aquel elemento de la naturaleza y el arte que consideramos bello, es número de oro o proporción áurea.
EL NÚMERO Φ Y LA PROPORCIÓN ÁUREA.
¿Sabes cuál es tu altura, pues ahora mide la distancia que hay desde el suelo hasta tu ombligo. Divide tu altura total entre esta medida, ¿qué número has obtenido?. Observarás que se aproxima bastante a 1,61803….al que se pueden ir añadiendo infinitos decimales. Se trata de un número que, a lo largo de la Historia, ha recibido diferentes nombres: número de oro, proporción áurea, proporción divina o número phi (φ) y que está presente en multitud de formaciones y fenómenos de la naturaleza, un valor que siempre se ha asociado a las proporciones más perfectas y armoniosas.
Los griegos descubrieron la sección áurea dividiendo un segmento de una manera especial: la razón entre la longitud total del segmento y la de la parte mayor debe ser la misma que la razón entre la parte mayor y la menor. A su vez, ese cociente es igual al número φ.
Desde antiguo se descubrió que en las proporciones de todo lo que nos rodea se esconde un secreto, es el número phi que, para muchos, idealiza la belleza, incluso se llegó a asociar con los dioses, de ahí el nombre de «divina proporción» que Luca Pacioli le dio.
Estaba claro PHI tenía que estar en el nombre.
¿Phi?
¿Una tienda de todas las especialidades de estética y belleza?
¿Todas?
¿Infinitas ?
INPHINITA
Ahí estaba el nombre
Redondo y rotundo.
O quizás mejor.. divino y proporcionado.